Y hay que llevarlo a cabo con un estilo que va mucho más allá de lo sexy. El Vey Peri engloba las características de los azules y, al tiempo, cuenta con un matiz rojo violáceo. En castellano es conocido como “bígaro”, es un tono entre el lila, el celeste y el lavanda. El ‘little black dress’, ese pequeño vestido negro cuya invención se atribuye a Coco Chanel, antes se encontraba guardado a la servidumbre y al luto. Entre las propuestas que hemos visto en las pasarelas hay modelos mucho más clásicos, similares a la famosa chaqueta \’especial\’, y otros más rompedores.
Una de las opciones más clásicas en el momento de conjuntar tu vestido rojo será decantarse por un par de zapatos negros. A la hora de elegir qué zapatos emplear con un vestido rojo, también cabe la oportunidad de crear enormes contrastes, siempre y cuando la ocasión lo deje. Habitual como el tono de la realeza, el morado se ve delicioso en conjunto con los metálicos, que acentúan ese aire de distinción que solo dicho tono puede ofrecerle a las prendas.
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El negro y el cobrizo están entre las tonalidades favoritas para llevar con el verde en sus tonalidades, puesto que crean un equilibrio especial con este bello color. Desde llevarlo con traje, hasta con vaqueros, pasando por looks veraniegos y también invernales… salvo la indumentaria de etiqueta, claro está”. Los mocasines italianos, especialmente los que están confeccionados en frente, serán los mucho más correctos para llevar con vaqueros o pantalones cortos. Quedan absolutamente descartados para hechos formales o semi formales.
Esta temporada se lleva singularmente el verde oliva, pero algunos diseñadores no renuncian a otros tonos mucho más peligrosos como el verde pasta de dientes. El color nude, piel o natural asimismo resultará una combinación idónea para tu vestido colorado. Con un par de zapatos de este color lograrás que el traje resalte todavía mucho más y sea el único y genuino protagonista de tu vestimenta. Si no quieres complicarte la vida, el colorado y el negro son el combo mucho más icónico. Puedes lucir tu vestido rojo con sandalias o taconazos negros, ponerle un bolso en este color básico o aun apostar por otros complementos, como sombreros o cinturones. Podemos sostener ese potente carácter de este calzado dejándole un importancia absoluto por medio de la combinación con tonos neutros como el beige.
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Pero si quieres llevarte tu vestido colorado a lo más prominente del encanto, hazlo con complementos dorados. Especialmente sandalias, pues nadie se resiste a una aceptable sandalia metalizada como ejemplo de elegancia. Pero si lo que quieres es que todo el importancia se pose en el vestido, mejor lúcelo con accesorios nude. Ya sea de hecho piel o con diseños de esparto y yute cuando llegue el verano.
Si quieres leer más artículos similares a Qué zapatos usar con un vestido rojo, te aconsejamos que entres en nuestra categoría de Moda y Estilo. Sandra (Cáceres, 1986) es licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas y trabaja para entre los mayores conjuntos de comunicación nacionales. Habitante en La capital española y con la moda como afición preferida, escoge hacer en Agosto de 2015 el perfíl de Instagram de @invitada_perfecta con la misión de catalogar sus looks de celebración preferidos. Si tu vestido rojo es tan especial que no requiere únicamente, no se lo añadas. Las proposiciones de los diseñadores para cubrir la cabeza van desde prolongar los cuellos de algunas prendas hasta hacerlos independientes en diferentes materiales y acabados. Los franceses le dan el nombre de su vino, el burdeos, pero para llevar a cabo patria diremos que aquí lo llamamos granate, vino tinto, guinda, grosella, borgoña…
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En un caso así las joyas no suelen ser indispensables, si quizá algún brazalete grueso o atentos largos o pequeños. Los collares bien se tienen la posibilidad de ignorar, en tanto que el encaje por sí mismo se encargará de destacar zonas como el pecho. Amado y detestado a partes iguales, entre quienes piensan que es un básico del fondo de armario y quienes lo califican de demasiado tradicional y conservador. Desde el instante en que, en 1960, el artista francés Yves Klein registrase el llamado \’International Klein Blue\’, este tono de azul ha inspirado a varios diseñadores. Si optas por llevarlo en cadenas, este año se lleva el \’glam punk\’ o punk glamuroso, que moderniza los códigos de esta tendencia con materiales mucho más suntuosos. Sinónimo de riqueza y opulencia, el dorado tuvo sus altibajos en el planeta de la moda, singularmente en instantes en los que la inclinación mucho más casual se impone.
Los que no tienen idea de tendencia te afirmarán que conjuntar colorado y rosa en un mismo look es una atrocidad. Haz oídos sordos, porque las it girls ahora demostraron una y otra vez que esta es la combinación actualmente. La sofisticación del color oro combinada con un bonito vestido colorado van a poder convertir tu look en el más increíble.
Por vez primera, “el pequeño vestido negro” fue diseñado por Coco Chanel y hasta hoy es el vestido mucho más clásico, que según los estilistas, ha de estar en el armario de toda mujer. Escogiendo los complementos adecuados con apariencia de zapatos o bolsos, puedes utilizarlo en banquetes, teatro, fiestas privadas, e incluso todos y cada uno de los días para ir a trabajar. Ashley Benson también le da un toque chic a su look con unos alerta de celebración. Combina tu vestido rojo con un par de zapatos de tacón en color negro. Siendo un estilo multicolor jamás lo mezclaría con más colores, lo combinaría con tonos neutros para que destaque el calzado.
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Este otoño-invierno brilla entre las tendencias de pasarela, que lo han anunciado en originales composiciones de colores y texturas, dejando atrás las prendas mucho más tradicionales. Cualquier prenda de color negro es un básico de un óptimo fondo de armario pero, si encima es de cuero, ahora debe guardarse como una joya. Jamás pasan de tendencia si son de un estilo no tan marcado, que resistirá el correr del tiempo. Pero quien tuvo una prenda verde y ha visto lo que estimula, no le tiene miedo al color.